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  • Foto del escritorGerardo Berdejo

Por qué no me sumo al paro

Antes que nada, expreso mi profundo respeto a las personas que han venido a Lima a protestar porque no tienen un buen sistema de salud, porque sus colegios se caen a pedazos a pesar de no tener más de 15 años de antigüedad, porque sus profesores violan a sus hijas, porque sus calles no están asfaltadas, porque no tienen acceso a tecnología para que sus casas sean frescas en invierno o verano, porque no tienen un sistema de transporte urbano que los respete como pasajeros, porque las minas contaminan sus aguas, porque las dependencias del Poder Judicial no les dan justicia; y una larga lista de reclamos totalmente entendibles que no han sido atendidos por los gobiernos de turno desde que tenemos memoria.



Respeto mucho a esas personas que entienden que el problema no es la actual presidente Dina Boluarte, primera mujer y provinciana que gobierna el país como muchos deseaban y que tuvo que tomar el poder porque el anterior presidente intentó el Golpe de Estado más torpe de la historia de todos los gobiernos del mundo. Respeto mucho a los manifestantes que entienden que sí hay dinero en el Estado, pero que la calidad de los funcionarios públicos de los gobiernos regionales es despreciable y cruel. Saben que roban y engañan a sus pobladores con obras absurdas y mal hechas, o simplemente no utilizando los millones de soles que se les asignó. Gobernadores Regionales que transan con el narcotráfico, con los cazadores furtivos o con congresistas que les piden su cuota de dinero para ayudarlos.



Respeto a todas esas personas que han venido a Lima a manifestarse de forma pacífica, pero que desgraciadamente son la minoría.

Por otro lado, entiendo a las personas que vienen a manifestarse de forma violenta. No seamos inocentes, están molestos y aceptemos que son la mayoría. Los entiendo porque gracias a congresistas y dirigentes de izquierda han sido engañados en los últimos años con una narrativa mentirosa o una serie de mensajes de odio y separación donde todo habitante de Lima es pro oligarca, pro monopolios, racista, clasistas, esclavista, etc. y no merece nada bueno.


Lograr que todos ellos estén molestos es muy fácil. Son tácticas de manipulación social conocidas en todo el mundo, y se utiliza sobre todo en personas deprimidas, con baja autoestima, con bajo nivel educativo y en todo grupo social con grandes carencias. Y el "Perú profundo" es el cocktail perfecto para lograrlo.


Finalmente, no tengo ningún respeto, ni consideración por aquellos que vienen a Lima o viven en Lima y solo quieren descargar su rabia y su rebeldía con causas absurdas destruyendo todo a su paso. Del mismo modo no tengo respeto ni consideración por aquellos congresistas, políticos y/o dirigentes que ha movido a las masas contándole mentiras o mensajes victimistas para que vengan a Lima a una especie de guerra civil donde habrá heridos y muertos, seguro muchos de ellos inocentes, sin embargo, esos cerebros azuzadores de las marchas lo verán todo por televisión y descargarán su furia y odio por Twitter.



Por algo la manifestación se llama LA TOMA DE LIMA. Ese nombre no tiene nada de pacífico, es una frase militar y lo militar no trae paz, salvo de manera irónica en la novela de ficción de George Orwell. Hoy hay mucha gente que está asustada porque todo indica que habrá mucha violencia. Ya lo han demostrado ayer 18 de enero en el Aniversario de Lima, y no ha habido ningún infiltrado ni nadie del grupo Terna como suelen argumentar.


Y hoy, como lo anunció con tanta pasión el anterior gobierno golpista de Pedro Castillo en caso lo vacaran, "correrán ríos de sangre".

Los pedidos de esta TOMA DE LIMA son:

  1. Renuncia de la presidente

  2. Asamblea Constituyente

  3. Nueva Constitución

  4. Liberación del ex presidente golpista Pedro Castillo


Como se puede ver, estos pedidos no solucionan ninguno de los problemas reales que tiene el país, en realidad los empeoran. Nuestro problema pasa por tener gente honesta y capaz en el gobierno, sobre todo en los gobiernos regionales. Y un país con tantas diferencias, va a ser muy difícil cambiar esa realidad, y con eso tendremos que convivir por muchos años más.


No me sumo tampoco porque yo vivo de mi trabajo, si un día no trabajo no gano dinero, si no gano dinero no puedo pagar mis deudas. Y está claro que ningún congresista de izquierda ni ningún dirigente sindical me pagará mi día no laborable. Casualmente, esas deudas que padezco son gracias a grupos de izquierda violentos/adoctrinados/manipulados muy similares a los que vienen a tomar Lima y que compartieron las denuncias falsas que hicieron en mi contra un grupo de feministas radicales (y veganas) en septiembre del 2019.


Muchos de esos grupos seguramente participarán en las marchas de hoy y más de uno, porque las conozco, causará destrozos y caos.

Estos grupos peligrosos son:

  • El colectivo Me Too y similares

  • RadFem feministas radicales

  • Mano Alzada

  • Anonymous for the Voiceless

  • Lima Animal Save

  • Lima Vegans

  • Red Vegana

  • Lima Vegan

  • Callao Vegan

  • Los Olivos Vegan

  • Perú Antitaurino

  • Adea


Participar en esa marcha para mí sería como volver a la casa de mi agresora después de sufrir las peores humillaciones, sería como continuar una relación con “la tóxica”. No gracias, con esa gente nunca más.


No al paro.


Gerardo Berdejo

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